México, desde hace más de una década, es un país totalmente abierto al escrutinio internacional. Le ha extendido una invitación abierta y permanente a los procedimientos especiales de la Organización de las Naciones, muchos de los cuales han visitado el país, incluso en varias ocasiones. Ha ratificado prácticamente todos los tratados internacionales en materia de derechos humanos, derecho internacional humanitario, derecho internacional de los refugiados y derecho penal internacional. Ha reconocido, además, la competencia a los mecanismos creados por tratados para conocer de quejas individuales (salvo al relativo a las desapariciones forzadas y al correspondiente a los derechos económicos, sociales y culturales). También ha reconocido la jurisdicción a la Corte Penal Internacional.